Relato cuidador profesional: Claudia Brizuela

“Cuidar de los cuidadores”
Mi nombre es Claudia Brizuela, soy Terapeuta Ocupacional y trabajo en Cognitiva Unidad de Memoria.

Relato cuidador profesional: Elena Cárdenas

Elena es psicóloga experta en psicogerontología. Como cuidadora profesional ha querido expresar con este poema la importancia del cariño, la paciencia y la tranquilidad en el cuidador. Si quieres votar por él compártelo en las redes sociales.

Relato cuidador profesional: Mónica Nieto

Mónica trabaja como neuropsicóloga. Como cuidadora profesional uno de sus objetivos es sacar el lado positivo de la realidad que vive. Si quieres votar por su relato compártelo por las redes sociales.

Relato cuidador profesional: Gema Castillo

Gema es cuidadora profesional. Con su relato no solo quiere compartir su visión como profesional, sino transmitir que todos algún día seremos cuidados. Si quieres votar por su relato compártelo por las redes sociales.

Relato cuidador profesional: Pablo Ramos

Soy cuidador #Supercuidadores. Empecé cuidando a los miembros de mi familia por necesidad, y fue
haciendo ese trabajo donde me di cuenta que no hay mayor satisfacción que
al cuidar de otras personas que necesitan de tu ayuda. Si quieres votar por mi relato compártelo por las redes sociales.

Relato cuidador familiar: Areceli Arellano

Araceli cuida a su abuelo y a su tía que tiene Síndrome de Down. Es a ellos a quienes dedica su relato. Si quieres votar por su historia compártela por las redes sociales.

Relato cuidador profesional: Diego Fernández

Diego es cuidador profesional. Con su relato contando su experiencia como director de un centro de día se comprueba que su trabajo es mucho más que eso. Si quieres votar por la historia de Diego comparte su relato por las redes sociales.

Relato cuidador profesional: Grace Moreno

Grace comenzó cuidando niños y personas mayores como parte de un proyecto del colegio. Conoce su experiencia como voluntaria. Si quieres votar por su vídeo compártelo por las redes sociales.

Relato cuidador familiar: María Antonia José

María Antonia ha cuidado a su madre enferma de Alzheimer y ha logrado ser sus ojos para que siguiera disfrutando de la belleza de los paisajes. Si quieres votar por su relato compártelo por las redes sociales.

Relato cuidador profesional: Raquel de Diego

Raquel es coach especialista en familia y pareja. Como cuidadora profesional ha querido compartir su relato dedicado a todos los cuidadores. Si quieres votar por ella difunde su relato por las redes sociales.

Relato cuidador familiar: Manuel García

Manuel lleva muchos años cuidando a su mujer, María, que sufre demencia. Gracias a la ayuda de sus hijos puede seguir dedicándose a cuidar a su mujer. Ha querido participar contando su historia. Si quieres votar por su relato compártelo en las redes sociales. 

Cuidador familiar: Alejandro Berraquero

Alejandro tiene solo 16 años, pero ya ha tenido que comenzar a vérselas con un duro enemigo: el Alzheimer de su abuela Matilde. Ha querido participar en los premios con su historia. Si quieres votar por él comparte su relato por las redes sociales.

Relato cuidador profesional: Esther Ocaña

Esther es psicóloga, especialista en psicogerontología y neuropsicología. Lleva trabajando cuatro años con GAM, Grupos de Apoyo Mutuo, GAM, porque considera que estos grupos benefician mucho a aligerar la sobrecarga del cuidador. Si quieres votar por ella, comparte su relato por las redes sociales.

Relato cuidador profesional: Rocío Pérez

Rocío Pérez es trabajadora social. Quiere enfocar su futuro profesional a la geriatría por lo que sigue formándose para lograrlo. Su vocación está motivada por la figura de sus abuelos. Con su relato quiere agradecer a las personas mayores por lo que aportan. Si quieres votar por ella comparte el relato por las redes sociales.

Relato cuidador familiar: Pablo Barredo

Pablo ha tenido que batallar durante 5 largos años con la enfermedad que le quitó los recuerdos a su madre: el Alzheimer. Si quieres votar por su relato compártelo en las redes sociales.

Relato cuidador familiar: Blanca Tejero

Blanca ha sido madre cuidadora durante varios años. Tuvo que enfrentarse a la difícil experiencia de ver morir a su hija afectada por un linfoma de Hodgkin. Ha querido participar escribiendo una carta dirigida a su hija. Si quieres votar por su relato compártelo en las redes sociales.

Usúe nos manda un relato muy especial sobre los primeros meses de dedicación absoluta a aquella persona a quien más quiere, su pequeño:

¿De cuántas maneras se puede explicar lo que siente una persona cuidando de otra? Carlos Fernández nos envía un relato muy personal:

Myriam nos habla sobre su querida madre y cómo el alzhéimer fue mermando sus capacidades físicas y mentales. Los cuidados, los días y las noches. Nunca abandonó a su madre a la suerte de esta enfermedad:

Desde el Ayuntamiento de Avilés quieren brindar un homenaje a los cuidadores familiares con este vídeo de las Jornadas que realizaron en la ciudad asturiana sobre el programa Acting for dependent:

María Belén es cuidadora profesional. Y aunque no suele hablar sobre su trabajo, nos ha querido enviar un vídeo relatando su experiencia cuidando de aquellos y aquellas que más nos necesitan:

Esperanza nos habla sobre la enfermedad de su hija Nayara y cómo su vida se ha visto alterada desde entonces. Las prioridades cambian y hay personas que desaparecen de nuestra vida; pero llegan otras que también nos harán felices:

Ana Belén nos envía un relato tan cotidiano como real. El de una cuidadora familiar que vela día y noche por quien más quiere. Aprovechando cada momento y disfrutando de cada sonrisa:

Os dejamos un relato que nos habla sobre cómo los recuerdos nos vienen a la cabeza y, aunque parezca que se desvanecen, siempre vuelven, una vez más, como las maletas que definen solo un hasta luego:

Toñi nos cuenta un relato en el que, pese a los oscuros túneles que a veces se instalan en la memoria de quienes más queremos, somos nosotros los que podemos alumbrar su camino:

Jenny nos relata la historia de vida de su madre y cómo, pese al alzhéimer, aún continúan luchando mientras que la vida ha puesto en su camino dos nuevas ilusiones por las que vivir:

Anxo nos cuenta una pequeña gran historia de lucha incansable que, desde hace ya 15 años, vive junto a Carmela de la mano y hasta que la muerte les separe:

Josefina nos cuenta cómo se dieron cuenta de que algo le estaba sucediendo a su madre. Tras el diagnóstico, su padre se convirtió en su cuidador principal, con la ayuda de sus hijos y de profesionales como los que trabajan en AFAL:

José Seoane nos habla sobre la enfermedad de Alzheimer que sufre su esposa y cómo ha cambiado no sólo su vida, sino la de toda la familia. Pese a esa "maldición" llamada alzhéimer, aún existe un mañana para ambos:

Gloria nos habla sobre su visión acerca de los cuidadores y cómo viven durante y después de cuidar a la persona que tanto les necesita:

María José lleva 28 años dedicándose de forma profesional al cuidado de personas en dependencia. Pero a veces, hay personas a las que les das algo más que sólo lo que una profesión exige. Eso fue lo que ocurrió con Pedro y María José.

José nos habla sobre su mujer y sus dos hijas. Nos habla de una historia de lucha ante la enfermedad de Huntington, y cómo, cada día, la adversidad les une con mayor intensidad:

Antonio nos da su particular visión del mundo desde la discapacidad; una discapacidad que no le impide vivir con los sentidos abiertos:

Isabel nos habla sobre su pequeña Noelia y cómo, pese a nacer con una enfermedad de mal pronóstico, se ha ido superando gracias al esfuerzo y dedicación diaria:

Mary Luz nos relata la historia de vida de su hijo Carlos. Una madre que ha luchado, pese a los obstáculos que a veces nos pone la vida, para que Carlos siga sonriendo:

Belén nos cuenta una historia muy especial. La historia de su pequeño Jorge y cómo, pese a padecer la enfermedad de Pelizaeus Merzbacher, ambos luchan y disfrutan de la vida día a día:

Lucía y Antonio son una pareja de jóvenes aventureros. Se conocieron hace 12 años y comenzaron a compartir su camino. En el año 2011, la enfermedad de Alzheimer se interpuso como un laberinto en su historia de amor. En un primer momento, la confusión y el miedo dificultaban encontrar la salida. Pero la fortaleza, la confianza, el optimismo y el buen humor de Lucía le permitieron continuar dando pasos para atravesar el laberinto. En uno de los cruces de caminos, encontró a AFAL Ferrolterra y junto con el apoyo de su familia consiguió afianzar esos pasos, que se dirigen siempre hacia la convivencia con la Enfermedad.

En este relato, Ramiro nos habla sobre la Enfermedad del Alzheimer y los cambios que se producen no sólo en la vida de la persona enferma sino también en la del cuidador:

María es terapeuta ocupacional en Geriatros Quijorna y nos aporta en este relato su punto de vista sobre lo mucho que pueden ayudar profesionales como ella para ayudar a otras personas:

Carmen nos cuenta su experiencia como cuidadora de su pequeño Hugo, un bebé que, pese a nacer con espina bífida, es su alegría diaria y un motivo para ver y disfrutar la vida de otra manera:

En este relato Vanesa nos cuenta su experiencia cuidando de su abuela y cómo su vocación se convirtió en una profesión gracias a Joyners:

A Mª Encarnación se le juntaron los sentimientos de angustia, culpa e incertidumbre tras conocer que uno de sus hijos nacería con espina bífida. Ahora sabe que para su hijo Jesús no hay obstáculos insalvables. Este es su relato:

Julio expresa sus sentimientos como cuidador en este relato y nos habla del trabajo que realizan en AFAL Ferrolterra para ayudar a todos aquellos cuidadores y cuidadoras que lo necesitan:

Encarna nos cuenta cómo se vive teniendo un hijo con esclerosis múltiple y cómo, a sus 67 años, compagina su cuidado con el de sus nietos y las labores del hogar:

Irina se casó con Gabriel en 1999. Ambos ya sabían que Gabriel padecía esclerosis múltiple. Entonces el amor prevaleció y ahora lo sigue haciendo, años después:

Encarna nos habla sobre su pequeña estrella. Nos relata cómo ejerciendo de madre y cuidadora de Noelia ha conseguido que sea una niña prácticamente autónoma:

Nuria Morte nos envía un relato sobre la soledad y la melancolía que, quizás, algún día todos y todas suframos. Y también cómo la figura del cuidador ayuda a mitigar estos sentimientos:

Gladis nos cuenta la lucha que su madre, con su ayuda, mantiene frente al alzhéimer y cómo disfrutan del día a día y de los pequeños detalles:

Luisa Fernanda nos cuenta cómo el cáncer ha aparecido en su vida y cómo se ha convertido en una cuidadora profesional a lo largo de estos años:

Aquí os dejamos una historia de reconocimiento hacia Mari Sartages, auxiliar de ayuda a domicilio que lleva largos años velando por la salud de los demás, incluso cuando la suya también es delicada:

Sandra nos relata una historia en la que el cariño que siente hacia otra persona hace que no dude en acompañarla y estar con ella cada día, luchando contra el deterioro cognitivo y todos los obstáculos que se presenten:

Desde AGADEA nos mandan un relato sobre Silvia, una SUPERCUIDADORA que lucha cada día contra el alzhéimer:

Dos cuidadores nos relatan la historia de la Plataforma de Afectados BBS y su lucha contra una injusticia: la de aprovecharse de aquellas personas que en residencias y en domicilios cuidan de aquellos que más les necesitan:

Sabrina nos brinda una historia de amor hacia su madre y hacia su hermano en la que el alzhéimer está muy presente. Una cuidadora informal que, a sus 35 años, ha tenido y tiene que lidiar con esta enfermedad en dos ocasiones:

Laura nos cuenta la alegría que supone su hijo Abraham para ella y toda su familia. También nos habla sobre los problemas médicos y los gastos a los que tienen que hacer frente para que su pequeño pueda tener una mejor calidad de vida:

Gloria Herreros nos habla sobre la enfermedad de Alzheimer y el daño que hace no sólo a la persona que la sufre sino también a aquella que la cuida:

Concha nos cuenta su grata experiencia cuidando de su padre y cómo esta situación le abrió los ojos para entender que su vocación era cuidar de otros:

Tamara nos cuenta su historia de vida y cómo surgió el amor por su trabajo, cuidadora profesional:

Una supercuidadora nos explica cómo la enfermedad de Parkinson ha mermado la relación con su padre y cómo trata de dejar a un lado su narcisismo, dando todo el amor que puede:

Mª de las Mercedes nos habla sobre las cuidadoras y cuidadores principales, que son aquellos que asumen la responsabilidad de la atención de forma permanente de la persona en situación de dependencia.

Sergio de Jesús nos cuenta la historia de vida de su padre y cómo el alzhéimer le afecta cada día:

María Lilia nos cuenta cómo el alzhéimer fue mermando las facultades físicas y mentales de su madre al tiempo que ella se daba cuenta que era quien mejor podía cuidarla:

Cruz nos envía este relato donde narra el amor que ella y su familia sienten por su hija Miriam. La historia de un amor infinito:

Susana Pérez nos relata su experiencia vital cuidando de sus padres. Las carreteras secundarias que ha tenido que tomar a lo largo de su vida forman parte de esta emotiva historia:

Lucía Zornosa López nos explica sus vivencias cuidando de su madre como ella le cuidó cuando aún era una niña indefensa:

Flor nos habla sobre Felisa, una compañera que durante su estancia en Alzheimer León le marcó para siempre. Su profesionalidad y cariño hacia los demás protagonizan este relato:

Hay cosas que nunca piensas que te puedan ocurrir a ti; entre ellas, algo tan desconocido como una lesión medular, especialmente la adquirida por un brusco y trágico accidente. Se rompe todo en tu vida: de pronto debes aprender a convivir con un cuerpo que te es ajeno, que no obedece, que no siente en algunas zonas, que duele en otras.

Eva Vinader trabaja en COGNITIVA UNIDAD DE MEMORIA MONCLOA y nos habla sobre el amor de una pareja que lucha cada día contra el alzhéimer. Este es su relato:

María José nos envía un relato de amor hacia su madre. Las vivencias que ha tenido con ella a lo largo de los años y las experiencias que ha sentido a su lado. Esta es su historia:

Esther Prieto es graduada en Trabajo Social y tiene un Máster en Trabajo Social Comunitario, Gestión y Evaluación de los Servicios Sociales. Actualmente trabaja en COGNITIVA UNIDAD DE MEMORIA CHAMARTIN y nos ha querido enviar un relato sobre cómo le gustaría ser cuidada:

Elena del Campo es licenciada en Psicología, especializada Neuropsicología e intervención social en la enfermedad de Alzheimer y otras demencias. Trabaja en COGNITIVA UNIDAD DE MEMORIA CHAMBERÍ y con este relato le gustaría "transmitir de una forma metafórica la gran labor del cuidador".

Isabel Gamarra nos presenta la historia de un amor atemporal, de dos personas que se aman pese a los obstáculos que, por desgracia, nos pone la vida:

Gloria es de Zaragoza y lleva trabajando como cuidadora profesional en la misma residencia desde hace 8 años. También cuidó a su madre durante 4 años. Esta es su historia:

Francisco es murciano, tiene 33 años y quiere compartir con todos nosotros un trozo de su vida, de su lucha, de su historia:

Amalia nos habla sobre los buenos recuerdos que guarda de su niñez y juventud. Sobre todo, las historias, las narraciones y la sonrisa de su abuela. Aquí os dejamos su relato:

Antonia María lleva tres años como cuidadora profesional. En este tiempo, su visión no sólo sobre la profesión sino también ante sus perspectivas vitales ha cambiado. Esta es su historia:

Esther Ocaña es licenciada en Psicología, especialista en Psicogerontología, Neuropsicología y Cuidados paliativos. Actualmente trabaja en la planta de Geriatría de un hospital de la Comunidad de Madrid, y quiere compartir con todos nosotros un caso que sin duda, ES MUY ESPECIAL.

Mari Carmen lleva trabajando como auxiliar de ayuda a domicilio desde hace más de 7 años en Martos (Jaén). Esta es su historia:

Gema ha trabajado como cuidadora profesional desde hace más de 20 años pero en la actualidad también tiene que hacerlo como cuidadora familiar, al lado de quien más quiere. Esta es su historia:

José Antonio trabaja como cuidador profesional y quiere servir de motivación y referencia a todos esos SUPERCUIDADORES que buscan superarse cada día y aspiran a llegar lejos en esta nuestra profesión… Orgulloso de ser un SUPER Cuidador, nos cuenta su historia:

¡Luces! ¡Cámara ¡Acción!


No se trata de una película, ni nos encontramos en un plató de grabación, es solo el sencillo guion que sigue nuestra madre cada día antes de salir de casa. Pero vayamos por partes. Toca presentar a los protagonistas.

Hola, soy Alaia y nací el 31 de diciembre de 2012, aunque mi mamá con todo su cariño me llama “Minimini”, enseguida sabréis por qué.

Beni era carnicero, madridista, y hacía un año que había contraído matrimonio con una excelente mujer. Pero tenía sólo 46 años cuando el 3 de septiembre de 2014 cambió su vida.

Es una persona tan especial que no sé cómo resumir en pocas palabras lo que vivimos día a día. Cuando la conocí estaba nerviosa y agresiva.
Solo diré que antes de venir a cuidarla ya tenía a otras tres personas y me llenaba de pena pensar que, encima de tener una enfermedad tan cruel, iba a estar en manos de cuatro…

Soy Terapeuta Ocupacional y maestra de Pedagogía Terapéutica pero también soy hija, amiga, consejera, compañera….
El deterioro cognitivo está presente en mi día a día.

Este relato se lo dedico a María Isabel Martín López, mi madre de 54 años, por ser una cuidadora nata.

Cuando pensé presentarme a este concurso pensé también que era imposible que nuestras historias se pudieran contar con palabras escritas.

Nunca pienso en el futuro, y menos desde que me dijeron que mi hija tenía una enfermedad en la que el índice de mortalidad era de un 20%. Decidí vivir como esa frase tan famosa de una película, 'vivir día a día'.

Relato cuidador profesional de Andrea Lettieri  para los Premios SUPERCUIDADORES.

Andrés es un chico de 25 años que hasta el 2006 siguió una vida dentro del marco habitual de cualquier joven de esa edad, hasta que en el infortunio de una noche de agosto tuvo un accidente de moto que le causó daño cerebral y un estado de coma durante varios meses.

Relato cuidadora profesional de Mayte TF  para los Premios SUPERCUIDADORES.

Hoy que es día que aún mis manos me duelen, pero menos y me cuesta mantener el bolígrafo entre los dedos. Siento el boli, aunque no tengo suficientes fuerzas para controlarlo.

Relato cuidadora profesional de María del Rocío  para los Premios SUPERCUIDADORES.

Que poca importancia damos a las cosas que tenemos, pero menos aún le damos a las cosas que podemos hacer cuando somos capaces, y son más importantes aún.

Relato cuidadora profesional de Mariela para los Premios SUPERCUIDADORES.

 

Conozco a Catalina desde hace quince años, cuando ella tenía 71. Trabajar con ella ha sido muy importante y significativo en mi vida.

Relato cuidadora familiar de Mª Teresa Alonso Pizarro para los Premios SUPERCUIDADORES.

Besos, besos y más besos: “Buenos días mi vida ¿qué tal estas?”, y con un hilillo de voz contesta “¡estupendamente!” o “¡superior!”, que también es muy suyo.

Relato cuidadora familiar de Mª Angustias Díaz Martínez para los Premios SUPERCUIDADORES.

Un día te levantas sin saber que ese día va cambiar tu vida y la de tu familia.

Relato cuidador familiar de Modesto Sánchez-Porro Aldana para los Premios SUPERCUIDADORES.

Una carrera de seis años llena de obstáculos que me hicieron ser más fuerte. Ahora empezaré a enumerar una a una, todas las piedras y cuestas y como no, también las satisfacciones y enseñanzas.

Relato cuidadora familiar de Isabel Munilla Saavedra para los Premios SUPERCUIDADORES.

La tristeza me cubre como la piel fría y escurridiza de un lagarto. Todo me asusta: los ruidos, las voces, la gente. “Quiero mi capullo de seda”, grito en mi interior.

Relato cuidadora familiar de Silvia Palacios Eugenia para los Premios SUPERCUIDADORES.

Solo permanece lo que se ama”. Esta es la frase que escogió mi madre para recordar siempre a mi padre. Ahí está, grabada para siempre, rodeada de crucifijos. Es la única tumba del cementerio con solo una frase, un canto al amor.

Relato cuidadora profesional de Esther Ocaña para los Premios SUPERCUIDADORES.

 

A ellos,

 

Relato cuidadora familiar de Inmaculada Hidalgo Serrano para los Premios SUPERCUIDADORES.

Dedicado a la persona que me dio la vida y me hizo crecer como ser humano”

Relato cuidadora familiar de Pepita Bernalte Bernardo para los Premios SUPERCUIDADORES.

Gracias a la enfermedad de Alzheimer por haberme permitido conocer a mi marido que durante cuarenta y cinco años de convivencia no habia sido posible.

Relato cuidadora familiar de Lina López Poveda para los Premios SUPERCUIDADORES.

Nunca pensé en dedicarme a ésta profesión, la de cuidadora, pues siempre he pensado que para dedicarse a este oficio, había que tener una pasta especial.

Relato cuidadora familiar de Nohemí Martínez Rodríguez para los Premios SUPERCUIDADORES.

Cuando llegué a casa de mis padres ese día noté algo diferente, mi madre parecía distinta, sin que ella pudiera saber que era lo que le sucedía.

Relato cuidador profesional de Josefa Arce Espinosa para los Premios SUPERCUIDADORES.

Siempre ante una enfermedad nos preguntamos, ¿por qué?. Es lo que conlleva el estar vivo.

Relato cuidador familiar de Patricia Rivas para los Premios SUPERCUIDADORES.

Sabía que a partir de aquel día todo iba a cambiar. Nos quiso reunir a los cuatro para comunicarnos algo; algo importante. Poco antes de darnos la noticia, recuerdo estar mirando por la ventana.

Relato cuidador profesional de Elena Benito Lara para los Premios SUPERCUIDADORES.

Cuando elegí estudiar psicología, me asaltaron multitud de dudas: no sabía exactamente cuales sería mis funciones reales, con qué tipo de personas trabajaría, se me venía a la cabeza imágenes de películas, sentía sensaciones contradictorias acerca de mi capacidad…

Relato cuidador familiar de Fuencisla Calderón para los Premios SUPERCUIDADORES.

La miraba, intentando ver en ella, en sus preciosos ojos perdidos, un atisbo de reconocimiento. Vacío. Una vez más vacío.

Relato cuidador profesional de Pilar Camargo para los Premios SUPERCUIDADORES

Un día cualquiera en un trabajo que no veo como trabajo…

Relato cuidador familiar de Sandra Marroquín para los Premios SUPERCUIDADORES.

Sandra Marroquín, es el nombre que adopté luego de un tiempo, porque siempre que decía mi nombre completo la mayoría de personas me hacia la misma pregunta ‘¿Sandra qué...?, repítame’, y me aburrí jijiji, ponía esa misma cara que se está imaginando.

Relato cuidador familiar de Yolanda Cuadra para los Premios SUPERCUIDADORES.

Mi nombre es Yolanda Cuadra Fernández. El día 5 de mayo cumplí 76 años. Mi esposo es Adolfo Royo Mangado. Hace ya más de veinte años que comenzó con síntomas de Parkinson.

Relato cuidador familiar de Pablo Barredo para los Premios SUPERCUIDADORES

Te despiertas una mañana en la cama. Abres los ojos. Y te das cuenta de que todo ha llegado a su fin. De que eres “libre”.

Relato cuidador familiar de Francisco para los Premios SUPERCUIDADORES

Mi nombre es Fran y voy a contaros la  historia que cambio mi vida: Todo empezó en el año 2014 cuando realizaba mi trabajo como auxiliar sociosanitario.

Relato cuidadora familiar de Lucía Mardu para los Premios SUPERCUIDADORES

Abro mi corazón para hablar de mis experiencias e historias como madre y cuidadora.

Relato cuidador familiar de Diana Vizcaino para los Premios SUPERCUIDADORES

Mi madre, Manuela del Jesús Bonillo, madre de 6 hijos, su adoración, su sueño: que sus hijos fuesen felices y que nunca les faltara de nada.

Relato cuidadora profesional sobre Amparo Torres para los Premios SUPERCUIDADORES

Me gustaría presentarles a una persona muy especial, una persona que es una SUPERCUIDADORA. Tengo el gusto de presentarle a Amparo:

Relato cuidador profesional de Iván Olivenza para los Premios SUPERCUIDADORES

Hola.  Me llamo Nico. Tengo 13 años. Quiero hablaros de Iván. Iván es mi hermano.  Bueno, en realidad no es mi verdadero hermano, pero para mí, es como si lo fuera. Me explicaré:

Relato cuidador familiar de Julio Pinto Cedeira para los Premios SUPERCUIDADORES

Mi nombre es Julio Pinto y tengo 82 años. Le pongo amor a todo lo que hago, a la familia y a los enfermos que son los que más lo necesitan.

Relato de Judit Tascón en la categoría de cuidador profesional para los Premios SUPERCUIDADORES

Soy Judit, cuidadora profesional, y me gustaría contaros mi historia:

Relato cuidadora familiar de María del Rocío Rodríguez para los Premios SUPERCUIDADORES 2017

A veces me gustaría ponerme en la piel de otros, concretamente, en la de quienes miran con extrañeza y miedo a mi hijo.

Relato cuidador familiar de Raúl Alfonso López

El relato narra la historia de una persona mayor, mi madre, que cuida de una persona dependiente, mi hermano, con una minusvalía y discapacidad de más de un 75% desde el nacimiento. 

Relato cuidadora familiar de Encarna Vives para los Premios SUPERCUIDADORES

Mi nombre es Encarna, tengo 4 hijos y 2 de ellos tienen discapacidad, son X Fragil.

Relato cuidador familiar de Lorena Gaztelumendi

Escribo este relato en nombre de mi abuela, Soledad, que sé que lo escribiría ella misma si pudiese y supiese que este concurso existe.

Relato cuidador profesional de Marisol García para los Premios SUPERCUIDADORES 2017

Cada vez que te “ato”, se me parte el alma. Me quieres pegar, a veces con éxito. Me protejo, te miro, te doy tiempo a que te tranquilices antes de terminar de “atarte”, pero ahora sí, sin éxito, claro.

Relato de cuidadora familiar de Gloria Herreros en los Premios SUPERCUIDADORES 2017

Un buen día esta enfermedad llamó a mi puerta, la peor experiencia que puede tener una persona, algo que nunca desearía a nadie. Destroza a la persona que lo padece y muere por dentro la persona que se encarga de su cuidado en cuerpo y alma las 24 horas del día.

Relato cuidador familiar de Carolina Vega para los Premios SUPERCUIDADORES 2017

Quiero presentar a mi SUPERCUIDADOR. Es Juan Carlos, mi marido, lleva cuidándome desde hace 10 años. El 22 de marzo de 2007 me levanté y me fui a trabajar, a las horas tení­a un dolor insoportable en una cadera.

Yajaira González, relato de cuidadora profesional para los Premios SUPERCUIDADORES 2017

Con el paso del tiempo nos vamos deteriorando, y esto ocurre de manera lenta, casi imperceptible. Ya una mañana no somos nosotros, somos alguien extraño, que de cuidar pasa a necesitar ser cuidado.

Un ángel entre nosotros, relato cuidador familiar para los Premios SUPERCUIDADORES

Estoy casada con un SUPERCUIDADOR. Yo ya lo sé, pero mi ilusión es que TODOS lo sepan y, además, lo conozcan.

Relato cuidador familiar de Araceli Arellano sobre su tía Roca para los Premios SUPERCUIDADORES

Para mi tía Roca, que tiene síndrome de Down pero es muchas cosas más

Y para todos los que, como ella, pintan con los dedos.

Relato de Mercedes para los Premios SUPERCUIDADORES

En el día a día desde el año 2005 cuido de mi madre. Desde el 2008 tiene alzhéimer junto con la esquizofrenia que padece desde el año 1995. 

Relato cuidador profesional. Sonia Casanova.

Ángel, es fiel acompañantede su familiar a los talleres de estimulación cognitiva que realiza en Cognitiva Unidad de Memoria Chamberí, en el Centro de Día El Enebral.

Relato cuidador profesional. Sonia Casanova.

Mi nombre es Sonia y llevo más de 20 años dedicándome profesionalmente al mundo de la diversidad funcional. Concretamente, mis últimos 10 años, al mundo del autismo, un mundo tan complejo y a la vez, fascinante.

 

La que es y sigue siendo desde hace ya más de noventa años. Después de airear la cama se afana en la búsqueda del abanico, le dedicamos tiempo a rebuscar, revolver y dar vueltas.

 

Johana García, fue diagnosticada desde los 7 años con parálisis cerebral lo cual llevó a mis padres a buscar solución a dicha enfermedad.

 

En este video reflexiono sobre las experiencias y emociones que nos unen a todos...

 

En aquel tiempo, andaba de un lado a otro de la cubierta de aquel enorme barco...

 

Frío, mucho frío... Estamos a mediados de febrero y  el viento azota la lluvia que cae con fuerza sobre la persiana a medio bajar.

 

Me llamo Elena González. Soy madre de Iñigo, un niño al que hace cuatro años le diagnosticaron un retraso madurativo y motor.

 

Lo di todo por ti. Y no, no me arrepiento y ahora, ahora que te has ido se me hace raro poder vivir sin ti.

 

En las últimas visitas ya notamos que no estaba bien. Se mantenía sola, sentada en la oscuridad, sin encender la tele.

 

Sara no podía imaginar cómo diecinueve letras iban a cambiar su vida tan radicalmente, cuando fue al hospital a recoger los resultados.

 

A lo largo de mi carrera profesional he escuchado infinidad de historias.

 

El algodón tiembla en mis manos mientras intento aislarme del olor. Parece que no siente el dolor pero me asusta hacerle daño.

 

Soy una persona con una gran vocación de servicio para generar en las Personas Mayores, y sus Familias, las ganas de seguir sacándole vida a los años.

 

El 30 de octubre de 1989, nació una persona muy especial, el que era biológicamente primo, pero sentimentalmente un hermano.

 

Año 2014. Mi nombre es Horacio, y la vida, y mis 30 años de incansable labor de docente y enfermero.

 

El 11 de abril del 2016, mi marido, se mareó y empezó a balbucear palabras sin sentido.

 

A pesar de un embarazo y un parto sin inconvenientes, en cuanto nació lo supe.

 

Soy cuidadora profesional, y durante mucho tiempo, como tal, he conocido y atendido a muchas personas que han dejado un pedacito de ellos en mi.

 

Cuando mi hermano y yo éramos pequeños, el abuelo se quedaba a cuidarnos un par de horas a la tarde mientras mi madre trabajaba. 

 

Paca es mi madre. En el pueblo le llaman “La menuda”, el apodo de mi abuela.

 

Este es el relato (en pocas palabras) de Vasile (yo cariñosamente le llamo Coco) y de mí.

 

Era un 12 de noviembre, cuando de pronto volvía a ser madre.

 

La paciente sobre la que voy a hablar fue la primera incluida en el programa Atención Farmacéutica Domiciliaria.

 

Nada hacía presagiar que aquella mañana a final de mayo, de cielos azules y sol primaveral...

 

Sebastián padece una enfermedad poco frecuente llamada Phelan Mcdermid, actualmente tiene 10 años y esta escolarizado en un centro de educación especial.

 

Esta historia tan satisfactoria ocurrió siendo alumna-trabajadora de la empresa Mancomunidad Integral de Servicios “La Serena Vegas Altas” .

 

Hace cerca de 2 años, conocimos AGADEA, habían diagnosticado a mamá de demencia de tipo vascular.

 

He conocido muchas mujeres de casi 80 años y sé lo difícil que ha sido su vida.

 

¿Quién vienes siendo tú? Me pregunta.

 

9 de la mañana, una fisioterapeuta preparada para trabajar.

 

El once de abril del 2016 Ricardo, mi marido, se mareó y empezó a balbucear palabras sin sentido.

 

Hace tres años que le diagnosticaron Alzheimer, y desde entonces, mi vida cambió. Desde el punto de vista de un joven:

 

Hola me llamo Raquel, tengo 45 años, fui mamá con 21 años.

 

En el año 2001 mi padre y yo veíamos la tranquilidad del hogar acabada.

 

Como educador he tenido el placer de poder compartir mi tiempo con personas mayores con gran dependencia y Alzheimer.

 

El día 12 de enero del año 2004, en la empresa donde entonces trabajaba, me cito en su despacho mi jefa inmediata.

 

Mi nombre es Ángeles y soy la tercera de cuatro hermanos. Ellos, mis hermanos, están afectados por el síndrome x frágil. Yo soy portadora. 

 

Soy Isabel y quiero compartir con vosotros una historia de unos amigos, de unos padres, Jesús y Beatriz. 

 

Homenaje a los cuidadores.

 

Este refrán recoge un poco lo que ha sido esta nueva etapa de mi vida, en la cual mi madre es diagnosticada con la Enfermedad de Alzheimer en el mes de junio de 2017.

 

Todo comenzó en el año 2010, el día en el que Ángela, mi madre, llevo un repollo para debajo de su cama, ese  fue el momento donde nuestras vidas cambiaron para siempre.

 

Tardé en reponerme de la impresión que me causaron las palabras del neurólogo cuando me comunicó que mi madre sufría de demencia.

 

A guardar a guardar cada cosa en su lugar, sin romper, sin tirar que mañana hay que jugar.

 

Hola, no recuerdo mi vida sin ser cuidador.

 

Escribo este relato acompañándolo con un collage de vídeos que hemos hecho los compañeros de la vivienda Txara ubicada dentro de la asociación Aspace Gipuzkoa.

 

En primer lugar, me gustaría decir que me llena de satisfacción y orgullo que exista un premio de tal índole y que sean ya 4 las ediciones llevadas a cabo.

 

Cómo cambió nuestra vida cuando empezamos a cuidar a nuestros padres, tuvimos que hacer de tripas corazón, literalmente.

 

Los/as cuidadores/as seamos profesionales o no lidiamos con un gran enemigo: Burnout.

 

Para mi esta experiencia es algo muy difícil de explicar con palabras, porque es comunicar lo VIVIDO,  algo muy  bonito y muy duro.

 

Desde hace unos años me estoy dedicando al Cuidado y Acompañamiento de personas que por un motivo no pueden valerse por si mismos.

 

Nací el 24 de Agosto de 1994, en Santa Cruz (Bolivia)

 

¿Cómo me siento como cuidador? Difícil pregunta.

 

“El ser cuidador en mi caso no es vocacional... Aprendo sobre la marcha. Por eso necesito a los profesionales a mi lado”.

 

Mi nombre es Sara y trabajo como neuropsicóloga en Cognitiva Unidad de Memoria.

 

Mi nombre es Manuel, tengo 80 años, soy el esposo y cuidador de María Torrescusa, ella tiene 75 años,

 

"Afortunadamente somos diferentes"  dice el estribillo de una canción que tantas veces hemos escuchado, cantado, acompañado,...

 

Durante gran parte de mi vida, tengo 63 años, he cuidado a mi mamá hasta sus casi 100 años de vida, menos 13 días.

 

Cuando un familiar cae enfermo, enfermamos todos. Es así y sólo así, como por primera vez, caes en la cuenta de que la vida es frágil y la tuya también.

 

No te pongo nombre,

 

Soy Ana, tengo 40 años y trabajo como educadora en un centro para personas con discapacidad intelectual.

 

Ella,

 

Dicen que los comienzos nunca son fáciles. Y qué razón, porque antes de ser profesional era estudiante,

 

Conocí a Francisco de manera casual, como sucede muchas veces en este tipo de trabajo,

 

Cuido a un anciano, muy risueño, se llama Alberto.

 

Hola, me llamo Carlos y soy un inmigrante boliviano, tengo 46 años. Llegué a España en el 2004 y llevo 14 años como cuidador.

 

Yo, Loredana Finesso, residente en la provincia de Málaga desde hace años, cuento mi triste historia.

 

Es curioso cómo suceden las cosas. Y es ahora que visto la madurez de mis años, cuando, pienso en lo importante que fuiste, padre.

 

Érase una vez un ser ruin y despreciable que vivía en el infierno.

A lo largo de nuestra vida nos encontramos con puertas cerradas, otras con puertas semiabiertas

 

Hola, soy Jenny, quería buscar en Google como se hace una memoria pero creo que la mejor forma es expresarla con mis palabras, sencillas pero sinceras.

 

(Antes de empezar, he comprobado en primera persona el efecto terapéutico de la música en personas con Alzheimer.

 

Mi nombre es Alba luz, 58 años, hija de Leonor y Pedro, criada en un barrio del Sur de Bogotá.

 

¡Como la quiero y cuanto la extraño! La quiero por su infinita manera de ser mujer, perfecta y simple.

 

Soy un paciente de cáncer de pulmón que pretende transmitir el mensaje de que un diagnóstico de cáncer no es en absoluto una condena a muerte incluso cuando se

 

Érase una vez una asociación llamada European Leukodystrophies Association: ELA España para los amigos, que no es otra cosa que una asociación que agrupa a

 

Emérita, Emeri para sus amigos, se sacó el carnet de conducir a los treinta y tres. Llevaba catorce años pensando hacerlo, desde que ella y su marido

 

Cierro los ojos y aún recuerdo tu mirada y como resurgías ante las adversidades que la vida nos iba poniendo.

 

Hace 5 años mi madre fue diagnosticada con demencia, y hace 3 años y medio me dedico junto con mi papá, a su cuido.

 

Me llamo Victoria, tengo dos hijos (Daniel y Víctor) de 23 y 20 años.  En verano hará ya 5 años que fueron diagnosticados con Anemia de Fanconi, una enfermedad poco

 

Hola, me llamó Maria Helena y mi hijo Alex tartamudea desde los 7 años.

 

Echo de menos tu sonrisa vacía, tus ojos mirando al vacío, tu memoria perdida entre las nubes intentando buscar los recuerdos ya perdidos. Te recuerdo en el sillón, sin

 

Esta es la historia de una súper heroína, de una mujer valiente a la que debo tanto… entre varias cosas, la vida.

 

Este relato se lo dedico a mi madre, una gran luchadora desde que nació.

 

Me llamo Ángela, estoy casada y soy madre de tres hijos.

 

Los Trabajadores de la Residencia Virgen de Valencia presentan a Encarnación Otero Álvarez. como cuidadora, y con este vídeo nos presentan su candidatura.

 

Un día cualquiera, 2 de septiembre de 2013, te levantas y sin saber ni cómo ni porqué todo cambia, de forma brusca, radical,

 

Hola, mi nombre es Leonel, allá por el año 2010 me quede sin trabajo y en la búsqueda ¡me ofrecen trabajar en un hogar geriátrico de noche! Por supuesto

 

Hola, no voy a ponerme nombre.

Me presentó como se verán miles de personas y alguna vez se habrán planteado esta situación. Solo pretendo

 

Después de casi 15 años dedicados a trabajar y convivir con personas catalogadas como discapacitadas, dependientes, o con diversidad funcional, entre otras formas, he de decir, que las características que pueden hacer “diferentes” a todas estas personas del resto de la sociedad, no han de ser denominadas incapacitantes, ya que como sucede con el resto de la sociedad, cada individuo presenta capacidades diferentes según la actividad a desarrollar.

 

Jamás pensé que el dicho: "Si no puedes con tu enemigo, únete a él", fuese a ser mi mejor aliado en estos años.

 

Dar la bienvenida a un bebé y enfrentarse a una separación en sus primeros minutos, nos ha cambiado la vida. Quienes hemos pasado por una UCI Neonatal, a menudo perdemos la inocencia que suele rodear la gestación, el parto y la crianza. Como sabemos de primera mano, a veces las cosas no salen bien.

 

Estaba escuchando música suave cuando sonó el teléfono.

 

Hola, me llamo Ana y he sido cuidadora de mi madre junto con mi hermana Rosa desde el año 2012 hasta enero de 2019 que falleció.

 

Mi nombre es Mercedes y en la foto me acompañan mi hermana Teresa y mi madre Josefa.

 

Mi madre ha sido cuidada y hemos sido todos sus cuidadores, inclusive mi pequeña hija de tan sólo 4 años.

 

Hoy me pregunté ¿quién soy yo?

 

Cuidadora: El primer sentimiento que me transmite mi cerebro al imaginar el significado de esta palabra es el de cariño seguido de tristeza.

 

Me había mudado a casa de mis padres, que vivían en la capital, cuando ya estaba próxima a dar a luz, por otra parte, algo muy corriente en la época.

 

Desde siempre tuve miedo a ser madre. El hecho de pensar en el dolor físico que supondría parir, me horrorizaba (entonces no era habitual emplear la epidural).

 

Esta es la historia que empieza con una mujer, que con 31 años, quiso ser madre.

 

Soy cuidador, no soy enfermo de alzhéimer, soy víctima también.

 

Por mi cabeza pasaba una tormenta de pensamientos, ya no podía seguir tejiendo conjeturas.

 

Soy Inma, la esposa y persona cuidada por Demetrio y voy a intentar describir como es mi esposo, y lo que hace por mí día a día.

 

No se cómo pasó, no sé cuándo pasó, sólo sé que una tarde de mucho calor, él no sabía quién era yo…

 

Pablo tiene 7 años y es un niño increíble, fuerte, cariñoso, risueño, simpático y pillín, le apasiona la música y las tecnologías.

 

Lo di todo por ti. Y no, no me arrepiento y ahora, ahora que te has ido se me hace raro poder vivir sin ti.

 

La primera llamada llega el día de mi aniversario de boda.

 

Mi nombre es Ángeles Palenzuela. Soy trabajadora familiar en el Sad de Palma de Mallorca.

 

Me gustaría compartir una reflexión que me acompaña en mi vida profesional y personal: se trata de la historia que hay detrás de la fotografía.

 

Soy una chica normal, con ganas de trabajar.

 

Este es el relato más triste que he contado, pero también el más bonito; no tiene segunda parte mala sino solo una primera y única que lo describe todo.

Primero hay que limpiar la herida con suero fisiológico. Luego desinfectar con betadine. Se enjuaga otra vez, y se deja secar. Ya solo queda un paso.

 

Nuestro pequeño Javier nació prematuro.

 

Hace 9 años que entro en nuestras vidas la presencia aterradora de un ladrón de vidas, sin saber casi nada del tema y de su efecto en las personas, llegó a instalarse y a alborotar lentamente nuestros días.

 

Cada día me levanto con la ilusión de ir a trabajar.

 

Desde siempre he cuidado y dado lo mejor de mí a los demás.

 

Me llamo Encarnación Lázaro Horrillo, tengo 68 años, y voy a contar mi historia como cuidadora.

 

Hace casi cuatro años comenzó nuestra nueva vida, con muchos duelos que ir superando.

 

Hace poco más de un mes aterricé en Medina del Campo...

 

Desde el momento en que aparece en tu vida un ser al que posteriormente le evaluarán su dependencia, te la va cambiando imperceptiblemente.

 

Un día frío de octubre fue el nacimiento del cuarto nieto y un día de junio con calor y viento caliente llegó el día del nacimiento del tercer nieto, del segundo nieto también en el mes de octubre con viento húmedo y el primer nieto llegó con las aguas mil del mes de abril.

 

"¿Cuando me esté muriendo voy a tener dolor?"

 

Desde hace muchos años, sentía una inclinación especial, no solo por cuidar, sino por hacerle la vida más alegre y fácil a las personas que no pueden valerse por sí mismas.

 

Un día te levantas sin saber que ese día va cambiar tu vida y la de tu familia.

 

Me llamo Luisa Fernanda y voy contar la historia de cómo me convertí sin dudarlo en una SUPERCUIDADORA.

 

Cuando te das cuenta que alguien fuerte como tu madre (que te ha criado a ti y cuidado a sus padres) necesita ayuda; que, aunque crea que es autosuficiente ya no lo es, tienes que empezar a cuidarla como ella te cuido a ti y como cuidó a sus padres.

 

Gisela Guevara, madre luchadora e impulsora de la campaña “Mi hermana y la enfermedad invisible”.

 

Hola, no recuerdo mi vida sin ser cuidador. 

 

Me llamo Elena González. Soy madre de Iñigo, un niño al que hace cuatro años le diagnosticaron un retraso madurativo y motor.

 

En las últimas visitas ya notamos que no estaba bien. Se mantenía sola, sentada en la oscuridad, sin encender la tele.

 

Mi nombre es Sonia y llevo más de 20 años dedicándome profesionalmente al mundo de la diversidad funcional.

 

Soy Ana, tengo 40 años y trabajo como educadora en un centro para personas con discapacidad intelectual.

 

Durante gran parte de mi vida, tengo 63 años, he cuidado a mi mamá hasta sus casi 100 años de vida, menos 13 días.

 

Paca es mi madre. En el pueblo le llaman “La menuda”, el apodo de mi abuela.

 

Besos, besos y más besos: “Buenos días mi vida ¿qué tal estas?”, y con un hilillo de voz contesta “¡estupendamente!” o “¡superior!”, que también es muy suyo.

 

Hola me llamo Raquel, tengo 45 años y fui mamá con 21 años. 

 

Hoy quisiera contarte muchas cosas.

 

Hoy, el abrazo y la sonrisa de Adrián (35 años) al darle el alta en el hospital, tras una larga estancia y teniendo que volver en una semana a por otro ciclo de quimio.

 

Érase una vez un ser ruin y despreciable que vivía en el infierno.

 

Nuestra hija María tiene 12 años. Es la pequeña de 3 hermanos. Nació con una malformación cerebral congénita ocasionada por el citomegalovirus durante mi embarazo. 

 

Me llamo Mari Luz, y desde hace 11 años me dedico solamente al cuidado de mi padre.

 

Raúl está preparándose para ser cuidador profesional. Sin embargo, hasta ahora su experiencia ha sido como cuidador familiar. 

 

 

La educación tiene como objetivo equiparnos para el futuro. Transfiere conocimientos, cultura y valores, contribuyendo a adquirir habilidades sociales y aprendiendo a ser autosuficientes.

Mi madre. Mi mitad

 

Es muy típico decir que nuestras madres son las mejores madres del mundo.

 

Mi cuidador, compañero, amigo, marido, etc…

 

Querido hijo Dragón:

 

Nací hace cincuenta años con Parálisis Cerebral.

 

Es difícil resumir, en unas pocas palabras, 16 años de cuidados a un padre, creo que podría escribir un libro.

 

La llegada de un hijo siempre es motivo de alegría y más cuando es tan esperado por toda la familia

 

Mi experiencia como cuidadora profesional y familiar ya va por los 15 años, empecé como miles de personas desconociendo totalmente lo maravilloso y gratificante que es dedicarte a esta profesión.

 

Irina se casó con Gabriel en 1999. Ambos ya sabían que Gabriel padecía esclerosis múltiple. Entonces el amor prevaleció y ahora lo sigue haciendo, años después:

 

Hace tres años que le diagnosticaron Alzheimer, y desde entonces, mi vida cambió. Desde el punto de vista de un joven:

 

Alejandro tiene solo 16 años, pero ya ha tenido que comenzar a vérselas con un duro enemigo: el Alzheimer de su abuela Matilde

 

Mi madre tiene 85 años, es una persona mayor y frágil desde hace 15 años con la capacidad funcional conservada gracias a los cuidados y atención que recibe por mi parte.

 

Un día cualquiera en un trabajo que no veo como trabajo…

 

Cuando llegué a casa de mis padres ese día noté algo diferente, mi madre parecía distinta, sin que ella pudiera saber que era lo que le sucedía.

 

Había una vez una niña que nació con sangre azul y no es porque fuera de la familia real, sino por una patología congénita en el corazón, aunque para mí es mi reina.

 

Han pasado dos largos años desde la partida física de mi madre y no hay día en que no la recuerde.

 

El 30 de agosto Amanda cumplirá veinte años.

 

Mis primeros días fui cuidada por mi padre ante el delicado estado de mi madre.

 

“Que te lo digo yo, que todo el mundo está enfermo”, volvía a decirle Carmelo con el mejor de sus  ánimos.

 

Sara no podía imaginar cómo diecinueve letras iban a cambiar su vida tan radicalmente, cuando fue al hospital a recoger los resultados.

 

“El ser cuidador en mi caso no es vocacional... Aprendo sobre la marcha. Por eso necesito a los profesionales a mi lado”.

 

Cierro los ojos y aún recuerdo tu mirada y como resurgías ante las adversidades que la vida nos iba poniendo.

 

Tulia, una de tantas pacientes que he cuidado desde hace más de 25 años, dejó una gran lección para mí. 

 

Un día como cualquier otro, mañana tarde o noche, no nos importa, te pondré el reloj 20 veces y las 20 veces dirás donde tienes tu reloj y yo te diré: "aquí lo llevas puesto"

 

En aquel tiempo, andaba de un lado a otro de la cubierta de aquel enorme barco...

 

En mi corta, pero intensa experiencia con las personas que cuidan a personas con minusvalía física he aprendido justo lo que necesitaba.

Mi hija Isabel tiene ya 13 años. Nació con una enfermedad genética llamada Síndrome de Clifahdd. Es tan rara que apenas hay 100 pacientes en el mundo. Isabel es una de ellas.

Mirando desde una ventana de un bar, con un abuelo que cuidaba, a lo lejos se veía una residencia recién reformada super bonita, un antiguo convento. Y el abuelito me dice hay tienes que trabajar y cuidarme.

Hoy día vivimos en una sociedad embotada y en muchos casos hasta deshumanizada; vivimos en un mundo muy digitalizado, lleno de muchísima información, pero escasa formación. Todo ello hace, que muchas veces lo esencial y aún lo más importante se nos escape de las manos; pocas veces tenemos “tiempo” para reflexionar o hacer aquello que más nos gusta, o bien preguntarnos ¿Qué o Quién es importante para mí?