Flor nos habla sobre Felisa, una compañera que durante su estancia en Alzheimer León le marcó para siempre. Su profesionalidad y cariño hacia los demás protagonizan este relato:
Hace muchos años entré a formar parte del equipo humano que trabajaba en Alzheimer León. Me sorprendió el cariño con el que se trataba a “nuestros abuelos” y la calidad de vida que se les proporcionaba.
Hoy podría hablar aquí de muchas personas pero tengo claro que hay una que me marcó por demás: Felisa (“Feli" para tod@s).
Son muchos los años que la Asociación Alzheimer León lleva funcionando, y son muchas las personas que pasan por esta casa para formarse y trabajar.
Hay personas que no pasan por aquí, sino que “Alzheimer León” pasa por ellas. Al echar la vista a tras no existe un solo momento de la historia de esta asociación en la que “Feli” no forme parte activa.
Son más de 20 años los que ha dedicado a atender, querer y cuidar a los nuestros abuelos.
Por eso ella para mi es la SUPERCUIDADORA, porque siempre trató de ser lo mejor profesional posible, (formándose, aprendiendo de sus compañeros, escuchando a nuestros abuelos, dándoles su tiempo, ofreciendo su experiencia y formación en el cuidado a compañeros y a todos aquellos que querían aprender e implicándose con cada uno de “sus abuelos”) sin perder en ningún momento el valor humano (nunca la faltaba una palabra bonita, una sonrisa, un beso o un pequeño apretón en la mano a modo de complicidad).
Quería, y atendía a cada uno de los señores como si fueran de su propia familia, y recordemos que en esta enfermedad el cariño es vital. Es lo único que no se puede olvidar porque solo hace falta absorberlo.
Feli ya está jubilada y ha cumplido con creces sus responsabilidades profesionales, pero no es solo eso: ha dedicado toda su vida a hacer más fácil la vida a nuestros abuelos. ¿No creéis que se merece una mención? Yo lo tengo claro.
Es el tipo de persona que yo aspiro a ser y el tipo de profesional-humano al que buscaré si necesito ayuda para cuidar a mi madre.
Ojalá el día que tenga que recurrir a ayuda profesional porque mi edad, o mi enfermedad así me lo hagan vivir, aparezca una “Feli” en mi vida.
GRACIAS FELISA POR ENSEÑARME TANTO CON TU TRABAJO Y DEDICACIÓN.
FDO. Una compañera que te admira
