A guardar a guardar cada cosa en su lugar, sin romper, sin tirar que mañana hay que jugar.

Compartir mi EXPERIENCIA DE CUIDADORA a través del sentido de esta canción es la mejor forma que tengo para compartir un camino cercano, sincero y comprometido con la crianza feliz e incondicional en el hogar de Álvaro, mi tesoro encontrado...

 

Soy Violeta (sólo de nombre, no de color), dependienta de regalos irrompibles y profesional del acompañamiento infantil sin estrés.

 

¿Mi labor?: ayudar a los niños a descubrir quiénes son, a través de la creatividad, experiencia, inteligencia emocional, y conseguir que dejen sus mejores huellas en el mundo que habitan para transformarlo en un lugar mejor...

 

Y, ya que guardar, según el diccionario de la RAE, significa tener cuidado de una cosa, vigilarla y defenderla...poner una cosa donde esté segura...comencé a buscar ese lugar mágico, especial, cercano y hogareño en el cual los niños y niñas no sintiera el dolor de la separación de sus familias, ni el estrés de unos ritmos que no se ajustaran a su propio ritmo, un lugar donde les permitieran ser ellos mismos y aprender jugando sin estrés...

 

Entonces descubrí a Álvaro, Almudena y Nacho, tres tesoros encontrados para mí a los que acompaño como cuidadora profesional en su domicilio particular desde el 8 de enero del 2018...

 

En la aventura de ofrecer lo mejor de mí a este pequeño de casi dos años, me he convertido en esa persona atenta y observadora de sus necesidades, ofreciéndole en su propia casa momentos cotidianos, mágicos y especiales para “guardar” a Álvaro como se merece, con cuidado, seguridad, mimo, permitiéndole sentir, experimentar y en definitiva, ser él mismo según su ritmo y  personalidad... Por eso quiero cantarles a otras familias que no sepan qué hacer con sus hijos: A guardar a guardar cada niño en su lugar, sin romper su integridad, sin tirar su creatividad, potencialidad ni emociones, que mañana habrá que jugar al juego de ser mayores y ellos serán los que manejen la sociedad que esperamos que cambie en sus manos...

 

Por eso es tan importante elegir bien, desde el corazón el lugar en el que queremos guardar a nuestros hijos el tiempo que no estemos con ellos.

 

Y este regalo no acaba aquí: ya que, soy una perseguidora de sueños cumplidos, se ha despertado en mí la semilla de crear mi propia casa nido para bebés de 6 a 12 meses que no puedan estar las 24 horas con sus mamás y papás, será una casa abierta las 24 horas para cubrir esos horarios de tarde y de noche que otras casas nido no cubren, contando con otras educadoras que como yo persiguen el sueño de ofrecer el mayor bienestar posible a los bebés y sus familias... y mientras este sueño que sueño despierta se hace realidad, estoy caminando con esta familia que me da la posibilidad de trabajar en su hogar, profesionalmente pero, sobre todo, compartiendo todo lo que soy, todo mi sentir y hacer como educadora y madre.

 

Y ahora sí, me despido con los brazos cargados de regalos, esperando haber movido vuestros corazones para que guardéis a vuestros tesoros con todo mimo y cuidado.

 

¡¡¡¡Hasta el próximo regalo que guardar!!!!