Botella de cristal vacía, haciendo alusión al Alzheimer

Anuncian las hojas marchitas que el otoño esta aquí,

Luciendo sus colores ocres, pavoneándose de mí.

Zas; como golpe tras la puerta sus recuerdos desaparecen,

Hablando de su pasado, sin reminiscencias de su presente.

Errante va, y con su mente en blanco está.

Inocente de su avanzada enfermedad.

Mustia su memoria, lozano su corazón.

Esperanza, languideces con el paso del tiempo.

Rendida y abatida me siento.

 

Sin embargo, tu risueña, me preguntas ¿Quién eres?.

Con llanto discreto acaricio tu pelo,

beso dulcemente tu mejilla, y,

¿Quién soy yo?  Mamá, soy tu hija.

¡No me olvides por favor!