Imagínate que un día no pudieras realizar tareas tan cotidianas como vestirte, lavarte los dientes o incluso comer… con esta incertidumbre viven muchas personas en situación de dependencia, pero gracias a la figura del Asistente Personal, han conseguido eliminar sus barreras diarias.
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Carlos tiene 62 años, hace ya 30 años que vino a vivir a Madrid por cuestiones laborales y, desde entonces no se ha movido de la capital, de la que ya se siente parte. A diario intenta pasear por el Retiro, perderse por los barrios más emblemáticos junto a sus amigos y, por encima de todo, ir cada domingo a animar a su equipo. Una vida normal, ¿verdad? Lo que no sabemos es que nuestro amigo Carlos sufre una tetraplejia que le paraliza el cuerpo y la sensibilidad desde el cuello hasta sus pies.
Desarrollar una vida independiente, elegir un proyecto de vida y seguir realizando nuestras actividades, son algunas de las aspiraciones a las que las personas con discapacidad tienen derecho. Para que esto sea posible, es necesario que reciban las ayudas y los apoyos necesarios, de mano de un profesional: el Asistente Personal
¿Qué es la “Asistencia Personal”?
Es una ayuda personal, prestada por asistentes personales, conforme a una serie de criterios e indicaciones de la persona que lo recibe. Para ello, es necesario una relación contractual de carácter laboral, entre la persona dependiente o el representante legal de esta persona y el asistente personal.
¿Quién es el “Asistente Personal”?
El Asistente Personal es una figura que realiza o ayuda a realizar todas aquellas actividades o labores cotidianas que una persona no puede ejecutar por sí misma, bien sea por una discapacidad o por cualquier otro motivo. Se caracteriza por ser una persona de apoyo, pero que hasta hace poco no había sido regulado por los servicios sociales en España.
Gracias a esta persona el dependiente puede tener el derecho de controlar su propia vida y vivirla con dignidad, optando a las mismas oportunidades que el resto.
Tareas cotidianas como lavarnos la cabeza, vestirnos o incluso irnos a la cama, dejan de convertirse en graves problemas para muchas personas.
¿Qué tareas se pueden realizar?
El Asistente Personal puede realizar cualquier tipo de tarea, aunque se suelen dividir en cinco áreas:
- Personales: se encuentran relacionadas directamente con la persona, tareas como el aseo personal, levantar de la cama, dar de comer, beber…
- Hogar: se llevan a cabo dentro de la propia vivienda, tales como limpieza, preparación de la comida…
- Acompañamiento: acompañar a la propia persona con discapacidad en su casa, al trabajo, gestiones fuera de la residencia e incluso actividades de ocio.
- Conducción: conducir un coche para llevar o recoger a la persona con discapacidad.
- Excepcionales y otras tareas: son aquellas tareas no cotidianas que se acordaran previamente, por ejemplo, situaciones imprevistas.
Si quieres saber más sobre la figura del Asistente Personal el próximo día 9 de julio te esperamos a las 12:00h. Pincha aquí y regístrate es muy fácil.