Llega el verano y todos queremos tener buen color, disfrutar de nuestras vacaciones y del buen tiempo. Pero si no cuidas tu piel podrías desarrollar cáncer.
-Clase recomendada: Conocer el cáncer en edad escolar
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El sol es necesario para nuestro organismo. Todos necesitamos que nuestra piel reciba rayos solares. Es una de las principales fuentes de vitamina D para que nuestro cuerpo pueda absorber el calcio.
Además, cuenta con muchos otros beneficios como:
- Disminuir la presión sanguínea, el colesterol en sangre y las infecciones respiratorias.
- Incrementar la respuesta inmunológica.
- Estimular las terminaciones nerviosas.
- Mejorar la capacidad de trabajo cardiovascular y la respiración.
Pero abusar del sol puede derivar en problemas mayores. Hoy, 13 de junio, se celebra el Día Europeo de prevención contra el cáncer de piel. El objetivo es concienciar a la población sobre la importancia de prevenir y diagnosticar el cáncer de piel a tiempo.
Cada año se registran aproximadamente dos millones de casos de cáncer de piel en todo el mundo. En España se diagnostica 5.000 personas al año. Lo que se traduce en dos o tres muertes diarias.
¿Por qué se produce?
El cáncer de piel se produce por el desarrollo de células cancerosas en las capas de la piel.
Hay dos clases: el tipo no melanoma y el melanoma.
El primero es el más frecuente. Se forma por otras células de la piel que acumulan el pigmento (que no son los melanocitos). Puede derivar en carcinoma de Células escamosas, Carcinoma de células basales, Sarcoma de Kaposi o Linfoma cutáneo.
El melanoma es menos frecuente, pero más agresivo. Se produce en las células que son melanocitos.
La piel es el órgano más extenso de nuestro cuerpo. Su función es protegernos de la temperatura, del sol y de las infecciones.
Pero tomar demasiado el sol influye en la producción de estos tipos de cáncer. Según la AECC, la Asociación Española Contra el Cáncer, “las personas que trabajan en el exterior, tienen más probabilidades de padecer cáncer de piel por estar más tiempo expuestos.
También influye estar al sol de forma breve pero intensa, como ocurre en las vacaciones. Y las quemaduras producidas durante la infancia, porque la piel tiene memoria.
Otros factores que repercuten son:
- La piel clara o sufrir quemaduras solares fácilmente.
- Utilizar cabinas de protección.
- Tener más de 50 lunares.
- Los antecedentes familiares de cáncer de piel.
- Tener más de 50 años.
- Haber sufrido un trasplante de órganos.
Prevenir es mejor que lamentar
Hay que estar alerta si el aspecto de la piel cambia, como una herida que nunca termina de curar o una pequeña protuberancia. También puede aparecer una mancha roja, áspera, que cambie de tamaño y sea irregular.
Por ello, es importante realizarse exploraciones, al menos, una vez al mes. Así quiere transmitirlo la Campaña Euromelanoma 2014, una iniciativa europea para informar a la población sobre la prevención y el diagnóstico precoz del cáncer de piel.
Cuando vayamos a examinarnos en busca de manchas o lunares, lo mejor es hacerlo frente a un espejo. Podemos ayudarnos de uno pequeño para aquellas zonas que no alcanzamos a ver a simple vista.
Tenemos que comenzar revisándonos:
- La cara, sin olvidar la nariz, los labios, la boca y las orejas por delante y por detrás.
- El cuero cabelludo, utilizando un peine para separar el pelo en capas.
- Las palmas de las manos, el dorso y entre los dedos.
- La parte interna del brazo y la axila.
- El cuello, el pecho y por debajo del mismo.
- La nuca y la espalda, usando un pequeño espejo para ello.
- Los glúteos, la parte de atrás de las piernas, las plantas de los pies y los espacios entre los dedos.
Si encontramos un lunar o mancha sospechoso tenemos que seguir la regla del ABCD y preguntarnos:
- ¿Es una mancha Asimétrica?
- ¿Tiene Bordes irregulares?
- ¿Presenta más de un Color?
- ¿Tiene un Diámetro mayor de 6 milímetros o crece?
Si cumplimos alguno de estos puntos o tenemos dudas lo mejor es acudir al especialista para que examine la mancha o lunar.
Podremos tomar el sol y disfrutar de sus beneficios si adoptamos una conducta responsable, que incluya:
- Usar protector solar durante todo el año.
- En caso de tomar el sol aplicar crema protectora cada hora y media.
- No abusar de los rayos uva.
- Evitar la exposición al sol en las horas de mayor intensidad (de 11,30 a 16,30).
- Evitar los atracones de sol. Es mejor ir cogiendo color poquito a poco.