Persona cuidando de una mujer mayor

Cada día hay una gran cantidad de personas que están pensando en cómo buscar residencias de ancianos concertadas y cómo elegir entre ellas la mejor opción para ellos mismos o para un familiar. En este artículo, te explicamos cuáles son los aspectos más relevantes a tener en cuenta a la hora de elegir una residencia geriátrica con plazas públicas más adecuada para tu familiar.

Llegados a la tercera edad, nos hemos ganado el hecho de disfrutar de las mayores comodidades y cuidados que podamos tener. No siempre es fácil que nuestros familiares más cercanos puedan ocuparse de las necesidades diarias que vayan surgiendo y con las que necesitaremos ayuda, debido a que esas otras personas suelen tener también otras responsabilidades de las que ocuparse. Por ello, disponer de la opción de una residencia de ancianos puede ser lo más beneficioso. Lo que está claro es que no puede ser cualquier residencia, y por eso es hay que tener en consideración varios aspectos para elegir la mejor.

Cuando una persona mayor no puede decidir por sí misma y tenemos que decidir por ella si llevarla a vivir a una residencia o no, nos encontramos en una situación que en los primeros momentos llega a ser un poco estresante. No es una decisión fácil, habitualmente genera rechazo por parte de todos los implicados. Los mayores sienten que están siendo abandonados y los que han tomado la decisión sienten que han fracasado al no poder cuidar de ese familiar y los están abocando a un final de vida que no querrían para ellos mismos.
La realidad es que esto no tiene por qué ser así. Pensar que llevamos a la persona mayor a la mejor residencia de ancianos posible es algo que no puede quitar ese peso de encima y darnos mucha tranquilidad.

Tipos de residencias de ancianos

Las residencias de la tercera edad pueden ser de diferentes tipos. Esto depende de elementos como el coste de la mensualidad, las condiciones en las que puede ingresar la persona y qué servicios ofrecen.

  • En el primer caso, hay residencias públicas y privadas. Las residencias públicas pueden ser de titularidad de un ayuntamiento, comunidad autónoma o del Estado, y para poder acceder a ellas es necesario cumplir con ciertos requisitos para que esa persona sea aceptada. En el segundo caso, el caso de las residencias privadas, siempre y cuando se abone la mensualidad solicitada, es suficiente para entrar.
  • En segundo lugar, encontramos las residencias de ancianos concertadas, las cuales son residencias privadas pero cuyas plazas están contratadas por la administración. En cuanto a su funcionamiento, es el mismo que el de las residencias privadas pero para los residentes que ocupan plazas concertadas es como si fuesen residencias públicas.

En otro orden de cosas, las residencias también valoran si las personas que van a ir a vivir allí son capaces de ejecutar ciertas funciones de forma autónoma (por ejemplo, comer, vestirse o asearse) o son totalmente dependientes de la atención de otros. Aunque es útil para tener una primera imagen no vale solo con que el interesado indique las condiciones, sino que también es la propia residencia la encargada de valorar y definir si puede atender al mismo o no.

  • En un tercer lugar, hay que valorar el tipo de servicios que ofrecen según las necesidades de la persona. Es posible, por ejemplo, que las personas solo asistan una cierta cantidad de horas al día para realizar actividades ajustadas a su edad (centros de día) o que desarrollen su día a día, entero, dentro de las instalaciones.

Cómo buscar residencias de ancianos concertadas y elegir la mejor

Empezar a buscar la residencia es la primera acción que hay que realizar, y es importantísimo no quedarnos con la primera opción que veamos. En este sentido, puede ser muy valioso el apoyo de un portal como Inforesidencias.com ya que será posible conocer muchos aspectos previos al ingreso sin necesitad de desplazarse a la residencia.

Las residencias concertadas tienen un sistema de acceso igual que el de las públicas. Existe un camino o proceso para lograr el ingreso en una residencia de 3ª edad concertada adecuada y que consta de las siguientes fases o etapas:

  • Los requisitos previos a su acceso son: Tener una edad de 65 años. Estar en situación de dependencia de acuerdo con la Ley de Dependencia (algo que se valorará durante el proceso).
  • Acceder por internet a la web de Servicios Sociales Municipales y pedir una cita con la trabajadora social.
  • Recibir la asignación de la trabajadora social que realizará el trámite.
  • Esperar la visita y presentar los documentos necesarios.
  • Esperar a que se haga la valoración de la dependencia y el programa individual.
  • Esperar a recibir la carta de aprobación, en caso de que se produzca, habrá que elegir entre residencias concertadas y saber cuál tiene plazas disponibles.
  • Se puede pedir que nos pongan en poner en lista de espera o buscar una que tenga plazas disponibles en el momento, pero no es nada fácil. A partir del momento en que se sabe que hay una plaza disponible hay que concertar la entrada en la fecha definida.
  • La resolución de la Ley de Dependencia establecerá también el importe a pagar de la persona (el copago).

La aprobación del proceso es el paso que más tiempo toma, pudiendo llegar a varios meses, por lo que es necesario armarse de paciencia y tomar la decisión de iniciarlo cuanto antes.

Una vez que entre las residencias de ancianos concertadas hemos encontrado la mejor opción...

Las residencias para adultos mayores son lugares pensados para dar a los usuarios la atención que requieren en esta etapa de su vida. Una forma de agradecer todo lo que han hecho por nosotros al lado de nuestra vida es, decidiendo por aquella que más beneficios pueda dar, considerando que una buena parte de su tiempo estarán allí. Lo mejor es poner en valor el hecho de que estarán protegidos, cómodos y seguros, y esa debe ser la premisa al momento de escoger.

En Inforesidencias, si lo necesitas, nosotros buscamos por tí la residencia.