Los programas de respiro familiar así como hacer uso de los servicios que residencias y centros de día ofrecen en torno a ellos, es en muchas situaciones la mejor opción para las familias que albergan en sus hogares personas con algún tipo de discapacidad.

Clase recomendada: ¿Qué son los programas de Respiro Familiar?

Existen situaciones en que las familias no pueden cargar al cien por cien con el cuidado de su familiar discapacitado y es muy importante que esas familias disfruten de unos días de descanso sabiendo que su ser querido va a estar en todo momento bajo la supervisión de profesionales del cuidado.

Si quieres saber más sobre los programas de respiro familiar, no te pierdas la próxima Masterclass de Francisco Almodóvar Machimbarrena, Diplomado en Trabajo Social, Licenciado en Criminología y Máster en Ciencias de la Seguridad y Criminología. Durante sus estudios en la Facultad de Ciencias Sociales de Zaragoza, se especializó en el Trabajo Social con personas mayores, asi como en trabajo social penitenciario. Su experiencia a lo largo de los años le ha llevado a conocer diversos programas de respiro y conciliación familiar.

¿Cuáles son las razones por las que han surgido este tipo de servicios?

Tras un aumento jamás visto en nuestro país de la esperanza de vida, el incremento de mayores dependientes también ha caracterizado el perfil de la población mayor. Dichos aumentos están acompañados por una tradición cultural propia de la sociedad española, fundamentada en la ayuda familiar en los cuidados de las personas dependientes de los propios núcleos familiares.


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Esto genera una cadena de cuidados protagonizada por la pareja “persona cuidada-cuidador”. En la medida en que las familias se centran en la atención de sus personas dependientes, estas pueden llegar a deteriorarse en múltiples aspectos debido a la imposibilidad de atender las cargas del cuidado de forma eficiente, llegando en muchos casos a desarrollar problemas tanto físicos como psicológicos en miembros cuidadores de la familia.

¿Qué efectos están generando las dificultades del cuidado por parte de familiares de sus dependientes?

En publicaciones del Imserso y otros autores como Campo (2000), Lazarus y Folkman(1986) o Biegel, Sales y Schultz(1991) se subrayan los efectos negativos que generan los cuidados informales familiares, los cuales surgen a nivel laboral, con el abandono del trabajo o la necesidad de la reducción de la jornada en muchos casos; a nivel de salud, apareciendo casos de problemas crónicos de cansancio que deterioran la salud gravemente; también influyen negativamente en la vida afectiva y relacional de la familia, teniendo que renunciar a vacaciones o a ratos de tiempo libre necesarios para la descarga de energía y descanso de los familiares.

¿Por qué es la decisión más acertada?

Es innegable que el apoyo informal familiar es la fuente de ayuda más importante para las personas dependientes en nuestro país, y por ello es necesario la protección de las personas que realizan esos apoyos dentro del núcleo familiar, los cuales tras una situación prolongada, pueden generar efectos negativos no solo sobre el cuidador, sino también sobre los cuidados que este mismo procura dar, pues pueden verse mermados.

Los programas de respiro familiar tienen un carácter temporal y especifico, sin dar un servicio a largo plazo como pueda ser el de una residencia, pero trabajando en situaciones especificas generadas dentro de las familias para que los profesionales del cuidado puedan moldearse a la respuesta para las necesidades puntuales de los usuarios.

Así, el programa de respiro busca dar respuesta al descanso del cuidado familiar para poder descargar a los cuidadores en momentos en los que es necesario que se tomen un respiro o necesiten conciliar partes de su vida laboral, familiar o social con el cuidado de su familiar.

¿Solo tiene que ir dirigido a personas mayores?

No, los programas de respiro familiar, también pueden especializarse en casos de personas con algún tipo de discapacidad intelectual o física.