Lavar la cabeza a una persona dependiente en la cama no es tan difícil como puede parecer. Te enseñamos a hacerlo de forma sencilla y efectiva con elementos que tienes en casa. 

Mantener el aseo de la persona a la que cuidamos es, además de necesario, una inyección de autoestima y relajación para esa persona dependiente. Además, logramos evitar problemas como infecciones y picores.

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Se debe lavar la cabeza de la persona a la que cuidamos al menos una vez a la semana, aunque dependerá de lo que requiera el propio cabello. Esta labor puede parecer complicada si hay que hacerla en la cama, pero se simplifica mucho con la técnica adecuada.

Para llevarla a cabo se necesitan un par de hules y toallas, una palangana con agua templada, una silla, champú y acondicionador, en caso de que la persona lo requiera, algodón para proteger los oídos, cepillo de pelo y un secador.

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Pasos necesarios para lavar el cabello:

  1. Preparar todo el material, lavarse las manos, utilizar guantes y explicar a la persona qué es lo que se va a realizar, solicitando su colaboración en todo aquello que pueda.
  2. Disponer la cama horizontalmente, retirar la almohada, cubrir la parte superior del colchón con un hule o un plástico, y poner sobre éste una toalla para evitar que se mojen las sábanas. Después se coloca a la persona con la cabeza en el extremo lateral de la cama.
  3. Desplegar otro hule debajo de la cabeza del dependiente. Se enrolla dicho hule por los bordes de forma que sirva de canal para que el agua descienda hasta la palangana. La palangana se coloca encima de la silla a la cabecera de la cama. También se podrá usar una bolsa de plástico grande, que se abrirá de tal forma que con los hombros de la persona que está en la cama se sujete y aguante el peso del agua que caerá al lavar la cabeza, protegiendo a la par las sábanas.
  4. Colocarle algodones en los oídos para evitar que entre agua y ponerle una toalla alrededor del cuello, a modo de collar.
  5. Mojar el pelo de la persona (antes de verter el agua, comprobar que ésta no quema ni está fría), aplicar champú, y masajear suavemente la cabeza haciendo círculos con las yemas (no utilizar las uñas para no provocar laceraciones). Aclarar. Repetir una vez más el proceso y añadir el acondicionador si es necesario, siguiendo las indicaciones del propio producto.
  6. Con la toalla que le rodea el cuello secarle la cara y la frente y envolverle la cabeza, friccionando suavemente para quitar el máximo de humedad. A continuación, secar el cabello con secador, acomodar a la persona y recoger y limpiar el material.

Aparatos que facilitan el aseo del cabello:

El lavacabezas hinchable, que eleva la cabeza de la persona que está en la cama de forma cómoda y tiene un depósito por donde sale el agua sucia a un recipiente.

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El gorro lavacabeza lleva champú incorporado para lavado en seco. Se coloca en la cabeza y tras un masaje craneal con él puesto durante dos o tres minutos, se retira, se cepilla el cabello y se seca sin necesidad de aclarar.

Y otra de las herramientas que el cuidador puede utilizar para lavar el cabello es el champú en seco. Es un spray que se aplica sobre el cabello, se deja actuar unos minutos y a continuación se cepilla. Dependiendo de la marca será necesario utilizar secador para quitar la humedad o no.